CRECER PUEDE DOLER.....

Al comenzar un nuevo año, tenemos una buena oportunidad de reflexionar sobre los acontecimientos significativos que dejaron huella en nuestra vida, analizar los positivos y aprender de los negativos.
De esta manera, comenzar el nuevo año con metas que nos permitan crecer, madurar y ser mejores personas.
Renovarnos, volver a empezar, es un proceso que causa muchas emociones: entusiasmo, ilusión, pero también nos compromete y esto mismo interviene para que abracemos la idea de que a partir de ahora, todo puede ser mejor.
Abandonar hábitos no es fácil y puede doler el dejar la "comodidad" de la rutina para hacer un esfuerzo y modificar o adquirir nuevos hábitos que nos permitan crecer.
Para esto, la voluntad juega un papel muy importante, ya que es a través de esta facultad del ser humano logramos lo que sabemos que es mejor para nosotros, a pesar de lo que nos cueste.
1- Da el primer paso:
Escribe tus propósitos.
Pueden ser solamente dos o tres, pero que sean fundamentales para las mejoras que quieres hacer, desde hacer una dieta que has postergado por años o meses, hacer las paces con alguna persona que amas y por alguna razón se ha separado, pedir perdón a quien haz lastimado, hacer un viaje, leer más....... anota todos y después seleccionas los más importantes.
2- Anótalos:
En una libreta, en tu celular, en una nota... tiene que ser un sitio al que tengas acceso fácilmente
3- Revísalos:
Periódicamente echa un vistazo a tu lista y analiza cómo vas. Si no haces esto, fácilmente los olvidarás y volverás a la rutina anterior.
4- Alégrate:
Reconoce tus logros y avances.
Subraya aquel en el que no has logrado trabajar.
Esta valoración nos ayuda a seguir adelante con entusiasmo.
5- Compromiso:
Crecer es un proceso constante en la persona humana, crecer es imaginar la persona que podemos y queremos llegar a ser y caminar hacia esa meta
SER LA MEJOR VERSIÓN DE TI MISMO
¡FELIZ AÑO NUEVO!